¿Cómo afecta a nuestra salud un cambio en la presión atmosférica? Es difícil encontrar una persona que, al menos una vez, no haya experimentado un deterioro en el bienestar debido a los cambios que ocurren periódicamente en la presión atmosférica. Para algunos, este fenómeno no representa una amenaza particular; es posible que esas personas simplemente ni siquiera lo noten. Sin embargo, para una cierta proporción de personas en alto riesgo, un cambio brusco en la presión atmosférica puede causar un deterioro significativo de la salud. ¿Es este fenómeno meteorológico capaz de ejercer un efecto tan fuerte en el cuerpo humano? Vamos a averiguarlo. ¿Qué es la presión atmosférica y cuál es su papel en la configuración de las condiciones climáticas? Por definición, esta es la fuerza de la presión de la columna de aire que actúa por unidad de área, que se ha medido durante mucho tiempo en milímetros de una columna de mercurio. En la práctica mundial, se considera que la norma es una presión igual a una atmósfera, que puede equilibrar una columna de mercurio de 760 mm en las siguientes condiciones: altitud cero sobre el nivel del mar; temperatura del aire cero; la ubicación geográfica del punto de medición es de 45 grados de latitud (la longitud no importa). El nivel de presión barométrica depende no solo de las condiciones meteorológicas actuales, su valor depende de muchos otros factores, a saber: Estación del año; hora del día; geolocalización. Como regla general, las fluctuaciones en la presión atmosférica que ocurren durante un año calendario nunca exceden los treinta puntos. En cuanto a las fluctuaciones diarias, su amplitud no supera los cinco milímetros. Sin embargo, existen excepciones que suelen ocurrir durante cualquier desastre natural. En tales casos, las tarifas diarias pueden incluso superar la tasa anual. La presión atmosférica juega un papel importante en la formación del clima, porque los siguientes fenómenos climáticos dependen en gran medida de ella : fluctuaciones de temperatura; la cantidad de precipitación, así como su frecuencia; dirección y fuerza del viento. Vale la pena señalar que los indicadores de presión atmosférica han ayudado durante mucho tiempo a hacer un pronóstico del tiempo, para lo cual incluso se inventó un dispositivo especial: un barómetro, que incluso hoy en día es utilizado por muchas personas en el hogar. El aumento de la presión suele preceder al inicio del tiempo seco y, en invierno, esto siempre conduce a un descenso brusco de la temperatura. Pero una disminución de la presión indica la proximidad de un clima nublado, así como una posible precipitación en el futuro cercano. ¿Cuál es el efecto de la presión atmosférica (barométrica) en el cuerpo humano? Los cambios bruscos en la presión atmosférica a menudo conducen a cambios en la presión arterial, así como a un cambio significativo en la cantidad de leucocitos en la sangre, que pueden ocurrir tanto en la dirección de disminución como de aumento. En la mayoría de las personas, la inconstancia de presión provoca fluctuaciones en la resistencia eléctrica de la piel. Muy a menudo, una presión barométrica baja provoca una posición elevada del diafragma, que se debe a un aumento de la presión interna en el tracto gastrointestinal. Al mismo tiempo, hay una activación de la producción de leucocitos, así como un aumento significativo en la resistencia eléctrica de la piel, lo que conduce a la interrupción del funcionamiento normal del tracto gastrointestinal, los pulmones y el corazón. Durante tales períodos, la probabilidad de desarrollar angina de pecho aumenta en un orden de magnitud y, en pacientes hipertensos, el estado de salud empeora significativamente. En cuanto a quienes padecen reumatismo, este grupo de personas presenta un aumento del dolor articular. Como regla general, para una persona sana, casi cualquier cambio en la presión atmosférica pasa de manera completamente imperceptible, sin embargo, la emocionalidad excesiva puede cambiar radicalmente todo. En las personas que a menudo se encuentran en un estado de excitación nerviosa, los saltos repentinos de la presión atmosférica no solo empeoran el estado de ánimo, sino que también pueden provocar una sensación de miedo irrazonable, además de conducir al desarrollo de insomnio. Por ello, se recomienda mantener siempre la calma olímpica, que sin duda ayudará a sobrevivir sin consecuencias especiales, tanto saltos de presión atmosférica como otros cambios en las condiciones meteorológicas.